Fundación Crisfe apoya proyectos sostenibles en Ecuador
Fundación Crisfe apoya proyectos sostenibles en Ecuador
Desde su nacimiento hace 30 años, en Fundación Crisfe creemos en las capacidades de las personas y hemos convertido en uno de nuestros propósitos generar un impacto positivo en la vida de los ecuatorianos.
Estamos convencidos de que por medio del fortalecimiento de las mismas con base a modelos sostenibles podemos impulsar la transformación de la calidad de vida de personas y comunidades en situación de vulnerabilidad. Para lograrlo, desarrollamos proyectos integrales e innovadores.
Nuestro trabajo se enfoca en dos ejes: educación y desarrollo territorial. Los que se dan a través de procesos participativos en los que identificamos las potencialidades y necesidades propias de las distintas comunidades.
Nuestros proyectos se generan en tres líneas de acción: socio-culturales; económico-productivas y organizativas-institucionalidades. Nos enorgullece haber impactado en la vida de más de 600 000 beneficiarios por medio del trabajo con 143 organizaciones aliadas durante toda nuestra trayectoria.

Gestión de proyectos

para el desarrollo del país
Por medio de procesos participativos, Fundación Crisfe identifica las potencialidades y necesidades propias de las comunidades del Ecuador. De esta manera impulsamos el desarrollo sostenible . Creemos en el fortalecimiento de los individuos como un punto de partida del crecimiento en todos los ámbitos de cualquier territorio. Queremos ayudar a las personas a incidir positivamente en su entorno por medio de procesos de formación y la generación de espacios para la integración y el trabajo colectivo, a través de la educación. A la par, buscamos promover proyectos de impacto social con la coordinación con nuestros aliados estratégicos.
Buscamos el desarrollo de acciones sostenibles, ambientalmente responsables e inclusivas que generen destrezas y capacidades en las distintas poblaciones. Con lo que hemos conseguido grandes hitos, como el logrado en el 2019 cuando Fundación Crisfe benefició a 91 845 ecuatorianos por medio de 57 proyectos con una inversión de 4 '238.047 en proyectos con el apoyo de 50 aliados estratégicos.
Del total de beneficiarios en el 2019, 67 822 formaron parte de los distintos programas educativos. Creemos que la educación es la mejor estrategia para empoderar a los beneficiarios en su desarrollo y que puedan mejorar su calidad de vida.
Nuestra beneficiaria Irma Sarcán, logró superarse gracias al proyecto de becas ocupacionales en Machalilla (Manabí). Esta beca le permitió capacitarse en cursos de corte y confección que le ayudaron a crecer sus conocimientos, poner un negocio y contar con un ingreso económico. “La primera vez que me pagaron por hacer el arreglo de una prenda me sentí feliz y útil, porque también puedo aportar económicamente a mi casa. Cuando uno hace lo que le gusta, así reciba dos centavos, es gratificante. Además, recibí una capacitación sobre técnicas para mejorar la economía y cómo priorizar los gastos, esto ha sido de gran utilidad para nuestra familia”.
El

servicio a la comunidad

es el alma de nuestra fundación
Nuestro interés es que nuestros beneficiarios desarrollen competencias y capacidades emprendedoras. Creemos que estas no solo aportarán a su crecimiento personal, sino también al desarrollo económico del país. Por ello, en el 2019 beneficiamos con nuestros distintos programas de emprendimiento a 15 258 personas.
En la rama de emprendimiento, Fundación Crisfe cuenta con una amplia variedad de programas que se enfocan en educar, capacitar, gestionar y dar acompañamiento a los emprendedores. Uno de nuestros principales proyectos es Emprende y Actúa, en el que en conjunto con la empresa Activaos buscamos generar una actitud emprendedora hacia la vida entre los más jóvenes.
Nunca es muy pronto para emprender, por lo que en Emprende y Actúa buscamos desarrollar las competencias y habilidades necesarias para lograr esta tarea en estudiantes que están en niveles de educación básica superior y bachillerato.
Fundación Crisfe referente en Educación Financiera
Con el apoyo de actores locales, aliados y la comunidad, Fundación Crisfe se dedica a entender a profundidad los territorios en los que va a desarrollar sus proyectos, tenemos tres lugares que son de interés para la organización. Estos son: Machalilla y Cañaveral en la provincia de Manabí; y Río Negro en la provincia de Tungurahua.
El acercamiento directo con la comunidad nos permite levantar sus necesidades y potencialidades de forma participativa para la generación de iniciativas que abarcan las dimensiones económico-productiva; organizativo-institucional y socio cultural.
Buscamos estructurar estrategias de intervención territorial en las dimensiones económico-productiva, social y de fortalecimiento organizacional. Nuestro aporte al desarrollo de las comunidades siempre establece una contraparte local que fortalece el principio de corresponsabilidad.
En 2019, por ejemplo, en la parroquia Río Negro ubicada en Baños de Agua Santa (Tungurahua) realizamos una serie de acciones como:
  • Mejora e incremento de la producción y comercialización de la papa china.
  • Fortalecimiento de la producción de truchas.
  • Producción experimental de cacao.
  • Inglés para emprendedores.
  • Viveros comunitarios.
  • Alianza con el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias para el apoyo técnico al cultivo de cacao.
Fundación Crisfe
, referente en Educación Financiera a nivel nacional
El programa de Educación Financiera de Crisfe educa a las familias en temas como presupuesto, metas financieras, endeudamiento responsable, inversiones, seguros, acceso al sistema financiero y alternativas al uso del dinero en efectivo. Nuestros programas están diseñados para poder ser impartidos en cualquier etapa de la vida de las personas- desde la niñez hasta la tercera edad.
Al involucrarnos en distintos aspectos de las comunidades, nos convertimos en responsables del bienestar de la gente. Nuestro objetivo siempre es dejar a las comunidades mejor que cómo la encontramos con iniciativas que generen un desarrollo a largo plazo que sea sostenible, replicable y escalable, siempre ligamos a nuestro principio de “servir como primera obligación”.