El fomento a la educación en TICs empodera a niñas y mujeres.
El fomento a la educación en TICs empodera a niñas y mujeres
En un mundo donde las tecnologías de la información y comunicación (TICs) se han convertido en una herramienta esencial para el progreso y el desarrollo, es fundamental reconocer y abordar la brecha de género que persiste en este campo. Aunque las TICs ofrecen innumerables oportunidades para el empoderamiento y la igualdad, las niñas y mujeres continúan enfrentando desafíos significativos en su participación activa y su acceso equitativo a la educación y las oportunidades laborales en este ámbito.
El Banco Mundial afirmó que el aumento del trabajo femenino contribuyó en un 30% a la reducción de la pobreza extrema en América Latina y El Caribe en la década pasada.
Esto significa que mientras más mujeres cuenten con acceso a herramientas que permitan su empoderamiento en el ámbito laboral, los países continuarán aumentando su productividad y desarrollo. Por lo tanto, empoderar a las niñas mediante la educación en TICs , es un imperativo económico y de desarrollo sostenible.
En este contexto, proporcionar a niñas habilidades tecnológicas desde una edad temprana, no solo se les equipa para competir en un mercado laboral cada vez más digitalizado, sino que también se les capacita para convertirse en líderes y agentes de cambio en el futuro en sus comunidades y en el mundo.
El fomento a la educación en TICs empodera a niñas y mujeres.

TICs como Motor de Empoderamiento

Desde las primeras etapas de la vida, es esencial cultivar en las niñas el manejo y el dominio de las TICs. Este enfoque les proporciona apertura e igualdad de oportunidades en un sector donde los hombres han predominado a lo largo de los años, según estadísticas los varones tienen más acceso al uso de tecnología. Las TICs brinda a las personas una mentalidad de liderazgo y visión para enfrentar los desafíos del mundo moderno y les permite tener acceso a carreras innovadoras y de alta demanda en el futuro.
Al aprender, liderar y contribuir activamente en el ámbito tecnológico, las niñas de hoy están preparándose para ser las líderes visionarias y disruptivas del mañana.
Según datos del Banco Interamericano de Desarrollo, América Latina y el Caribe tiene un mayor acceso a la tecnología para las mujeres versus otros continentes como África y Asia. Sin embargo, el acercamiento a las tecnologías aún es limitado; incluso, en cuestiones básicas como el acceso a Internet o a dispositivos móviles.
En Ecuador, según el estudio del BID ‘¿Desigualdades en el mundo digital? Brechas de género en el uso de las TIC’, un 52 % de las mujeres tiene acceso a Internet versus el 64 % de los hombres. Mientras que en el acceso a dispositivos móviles, un 73 % de las mujeres lo tiene versus al 81 % de los hombres.
En ese mismo estudio, se menciona que en la región solo 3 de cada 10 trabajadores en matemáticas y ciencias de la computación son mujeres, ya que solo el 28 % de los graduados en carreras TIC son féminas. A pesar de lograr un título, las mujeres encuentran otra brecha cuando logran conseguir un trabajo en posiciones en áreas TIC, pues según el estuvio tienen un salario 40 % menor que el que perciben los hombres.
El fomento a la educación en TICs empodera a niñas y mujeres en Ecuador.

Innovación Educativa y Tecnológica: Abriendo Caminos hacia la Igualdad de Género

El panorama educativo está siendo transformado por avances tecnológicos que hacen que el aprendizaje de las TICs sea más accesible y atractivo para las niñas. A través de plataformas educativas innovadoras, como juegos interactivos y aplicaciones programables, las niñas pueden desarrollar habilidades tecnológicas de manera lúdica y participativa. Además, el surgimiento de recursos de aprendizaje en línea está democratizando el acceso a la educación tecnológica, permitiendo que niñas de diversas procedencias geográficas y socioeconómicas exploren su potencial en un entorno inclusivo y equitativo.
Según la Organización de Naciones Unidas, en los próximos años alrededor del 75 % de los trabajos estarán enfocados en STEM, de allí nace la importancia para poder empoderar a las niñas en encontrar vocación en las áreas de la ciencia y la tecnología.
Es importante que las niñas, adolescentes y mujeres accedan a más espacios inclusivos que permitan disminuir las brechas sociales, alcanzar la igualdad de género y un desarrollo económico sostenible. La educación cumple uno de los papeles más importantes en este punto: se ha demostrado que educar desde edad temprana a las niñas logra romper con el ciclo de desigualdad en las familias.
En el mundo hay algunos ejemplos de proyectos educativos que impulsan a las mujeres a la STEM.Techonavtion, una organización sin fines de lucro, implementó en Urkebistán (Asia Central) un proyecto llamado Reto Tecnológico de Urkebistán en el que niñas y jóvenes recibieron clases de tecnología y buscaron crear soluciones a problemas actuales. Las diferentes ediciones del programa en ese país ha desembocado en la creación de aplicaciones que aportan a las personas y ha fomentado que las mujeres ingresen a carreras STEM, así como su participación en otros programas en donde han ganado premios, según un artículo de la Red de Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible.
En última instancia, el camino hacia la igualdad de género en el campo de las TICs exige un compromiso continuo y multifacético. Más allá de simplemente enseñar habilidades técnicas, es crucial fomentar la confianza, la resiliencia y el espíritu de innovación en las niñas.
Al empoderarlas a través de la educación en tecnología, estamos cerrando la brecha de género y enriqueciendo a la innovación tecnológica con una diversidad de perspectivas y talentos, allanando el camino hacia un futuro donde el potencial de cada individuo, independientemente de su género, pueda florecer plenamente en el mundo actual.